Hola a todos! Si la semana pasada arrancábamos esta newsletter con el repaso a las que para mí han sido las 10 series más importantes del año, es lógico concluir el año con el repaso a lo que han dado de sí las plataformas.
Este 2022 será recordado en términos de plataformas de VOD/OTT (dejemos el término “streaming” para servicios que realmente transmiten video en tiempo real como “Twitch”) como el año en el que los grandes grupos de contenido audiovisual empezaron a recortar al ver que no les salían las cuentas. Se acabó la orgía del derroche y de la producción de contenido “a mansalva”; la frenética carrera por tener el máximo número de suscriptores cueste lo que cueste, o el pescar en un océano que en muy pocos años se ha vuelto rojo tirando a negro. Al fin y al cabo, en plena crisis energética e inflacionista, el bolsillo de la gente no da para más.
Los dueños de las plataformas y los inversores, han pasado de descorchar botellas de champán, a sacar la lupa y empezar a vigilar cada dólar que se invierte y cada dólar que vuelve al bolsillo. Llegan los tiempos de las subidas de cuota o del seguir pagando lo mismo tragando anuncios, llega el fin del compartir cuenta con la vecina, y de quedarse con una o dos plataformas únicamente, o bien ir rotando cada mes en base a un continuo alta/baja de los diferentes servicios.
Los parámetros de rentabilidad de las plataformas han cambiado: Ya no vale sólo el número de suscriptores, ahora lo que cuenta es el dinero ganado con cada cuenta activa (sin obviar que muchas cuentas siguen siendo compartidas, o las promociones y rebajas que se hacen en el precio de algunas suscripciones). Ahora es más importante el numero de bajas al mes que sufre una determinada plataforma, es decir, la fidelidad del cliente a la misma; el tiempo que pasa cada suscriptor viendo esa plataforma y no otras, e incluso las nuevas altas producidas a partir del estreno de un determinado contenido. Y como siempre, la conversación, la tan traída conversación, el estar en boca de todos o el que hasta el “Marca” le dedique un artículo a tu serie entre las noticias de los últimos fichajes del Madrid o del Barça.
Pero como siempre, no a todo el mundo le ha ido igual, así que vamos a repasar donde están en este final del 2002, cada una de las plataformas que tenemos en España.
NETFLIX, la plataforma
La Plataforma, así a secas, como se la conoce en algunos países, termina este año endeudada hasta las cejas, y con sus inversores en estado de alerta. Por primera vez en 2022, la plataforma perdió suscriptores y puso fin (o está en el camino de hacerlo en los próximos meses) a dos de sus máximas premisas: La compartición de cuentas que una vez sostuvo como parte de su estrategia de fidelización, y la inclusión de publicidad con una nueva cuenta de precio más bajo, destinada a aquellos que ven esporádicamente alguna serie y que quieren seguir al tanto de las modas televisivas con un mínimo desembolso.
Netflix a día de hoy es una plataforma generalista que sigue la estrategia del “Si sólo puedes pagar una, que sea ésta”, mientras va recortando poco a poco inversión en producción, y pareciéndose más a la TDT de la que muchos salimos huyendo hace tiempo. Su prioridad de acaparar la conversación se hace cada vez más evidente, y además es la plataforma para la cual esto es más sencillo de hacer, pues de todos los servicios, es aquel que tienen un mayor número de personas a bordo, con lo cual es más fácil que la conversación en el trabajo o en las sobremesas familiares se centre en alguno de sus contenidos.
Sin embargo, este año no ha tenido un éxito que haya dominado el panorama televisivo como en años anteriores con “La Casa de Papel”, “Gámbito de Dama” o “El juego del Calamar”; y es que los éxitos de “Stranger Things 4”, “Dahmer” o “Miércoles”, han carecido del ruido en los medios generalistas que hicieron los de anteriores ejercicios. Si a eso le añadimos el quedar fuera del gran duelo de la temporada otoñal (Dragones contra Anillos), nos encontramos con una plataforma que sigue siendo mayoritaria pero que poco a poco va perdiendo relevancia de cara al seriéfilo militante. Un servicio donde prima más la cantidad que la calidad y que satisface precisamente a aquellos que necesitan tener muchas cosas de entre las que elegir, más que a aquellos que se sientan por la noche y quieren algo más que pasar el rato hasta la hora de dormir. Al menos, esa es mi impresión (equivocada o no).
HBO: Cuando MAX es menos
El caso de HBO y de todo el grupo Warner empieza a parecerse al de las Cajas de Ahorros españolas, que llegado un momento a mediados de la década pasada, necesitaban seguir fusionándose con alguien cada año, para poder seguir tirando. HBO Max es ahora mismo un batiburrillo de contenidos de muy distinta procedencia donde resulta difícil encontrar cada cosa, y con su sello de calidad HBO cada vez más desdibujado entre tantos “blockbusters random” de DC y WB.
Al grupo Warner tampoco le salen las cuentas, y ha acabado reculando en aquello de estrenar en su plataforma los estrenos de cine 45 días después (Dune, Matrix4, The Batman…) para finalmente fusionarse con el grupo Discovery, el canal de los “realities” de trasteros, subastas y reformas de casas. El resultado lo veremos el año que viene cuando HBO Max pase a llamarse simplemente MAX y emprenda al igual que Netflix un camino hacia ser una TDT Premium con todo tipo de contenidos generalistas (si no lo es ya), salvo por la media docena de series de HBO que seguirán estrenándose en la plataforma de manera más o menos visible.
A esto hay que añadir el extraño caso de las desapariciones del catálogo de algunas películas y próximamente de series tan icónicas como “Westworld”. Cuando a una empresa le sale más barato no tener algo en catálogo que tenerlo, es que las cosas muy bien no van. Cuando se fía a la rentabilidad de algunas series el sacarlas de catálogo y venderlas a las nuevas plataformas FAST (las de suscripción gratuita con publicidad al estilo PlutoTV) y resucitar un modelo que parece el de la Sindicación de series de las Networks norteamericanas de hace algunos años, pones en evidencia que tus números son de un color rojo-encarnación.
HBO hace tiempo decidió perder su identidad. Falta por ver cuantas más cosas pierde en 2023.
Amazon “Primark” Video
El caso más curioso de todas las plataformas de las que disfrutamos. Una plataforma que en EE.UU. ha batido a Netflix por primera vez en número de suscriptores, pero claro, no exactamente con su servicio de vídeo, sino con su servicio global Prime que contienen una parte de vídeo, cine y series. Porque… ¿Hay alguien que pagaría por Prime Video si no incluyera el servicio de envíos de Amazon?
Este año hemos visto el intento de Amazon por lavar la cara de su Prime Video con nueva app, logo e interfaz, con una subida de cuota notable y con la incorporación de los partidos de fútbol de la Segunda División Española (pago aparte de 10€/mes) y el estreno de su serie bandera “Los Anillos de Poder” donde se han gastado lo que no está escrito para hacer el ruido que necesitaban, pero sin llegar a crear ese fenómeno que genera (y sobre todo mantiene) suscripciones nuevas.
A pesar del lavado de cara, Amazon Prime Video sigue teniendo el aspecto de esas tiendas de ropa barata donde se debe encontrar el par del calcetín de oferta dentro de un inmenso cajón de similares. Ese aspecto de no saber que narices venden, de no saber que es lo que tienen que destacar en portada, o de parecer más el servicio de VOD de Antena3 y Telecinco que los propios AtresPlayer o MiTele.
Da la sensación de que no hay nadie con criterio que “cure” su inmenso catálogo, como da la sensación de que siguen sin tener series que fidelicen a la audiencia más allá de “The Boys” o quizás “La Rueda del Tiempo” (que ya veremos).
Prime Video sigue pareciendo esa agencia inmobiliaria que monta la pareja del constructor/a para complementar el negocio del cónyuge y rascar algo de un mercado (otrora) en auge con poco criterio y menos dedicación aún. Algo que si un día desaparece nadie va a echar en falta, y que mantiene un aspecto casposo y cutre como principio fundacional de la empresa. Nada que no te pueda dar cualquier otra plataforma más y mejor, salvo que ésta te la regalen con un servicio de envíos gratuítos en la mayor tienda online del planeta. Casi nada, o mejor dicho casi todo.
Disney+ en… “Un día en la Feria”
Pues no, tampoco le salen las cuentas a Disney+, que en 2023 optará por subir significativamente su cuota a sus afiliados, lanzando paralelamente un servicio más barato (o al precio actual sin subida) con los consabidos anuncios. Aunque en mi opinión, la plataforma de Mickey tienen dos problemas más serios: El primero, la absoluta dependencia/predominancia de determinadas franquicias que hace que para muchas personas Disney+ sea poco más que “dibujinchis”, lycra y Star Wars, con sin embargo, un estupendo catálogo de series adultas con procedencia de ABC y de FX, que queda completamente desdibujado (cuando no oculto) entre sus “IPs” más mainstream. El segundo, el carácter altamente fungible que tienen la mayor parte de esas series de franquicia ¿O es que hay alguien que se va a abonar a Disney+ para ver en 2023 “El Libro de Boba Fett” o incluso “Ms Marvel” una vez que han sido emitidas y comentadas hasta la arcada en YouTube y similares?
Todo ello sin llegarnos a meter en los guiones de muchas de esas series de “Marvel” o “Star Wars” que parecen guionizadas por algoritmos; o sin llegar a comentar la peligrosa deriva que parecen llevar algunos productos de la casa que empiezan en el Episodio 1 siendo una cosa y a mitad del desarrollo de los mismos giran 180º (¿Tras las críticas en redes sociales?) y acaban siendo otra muy diferente.
Disney+ es otra plataforma que necesita re-equilibrar su oferta o al menos variar en su estrategia de marketing si quiere llegar a un público más amplio, porque ahora mismo no es más (ojo! en apariencia) que una cadena de comida rápida; una suerte de “hogar del friki” donde sin embargo, en su trastienda “STAR”, se pueden encontrar auténticas joyas fruto de la inmensidad del imperio Disney. Un imperio, donde hasta ahora al menos, nunca se ponía el sol.
AppleTV+. La estrella es el ecosistema
Sin duda la sorpresa de este año en cuanto a plataformas. El pequeño servicio de televisión de Apple ha dado el salto en calidad que necesitaba y se ha revestido del sello de plataforma “gourmet” que durante décadas llevara HBO. Muchos de sus estrenos de este año copan las listas de mejores series del año entre críticos y seriéfilos, y eso ha servido para que aquellos que siguen sin saber lo que es un Mac, descubrieran un catálogo de series distintas y arriesgadas, casi “a contracorriente”, con un diseño de producción exquisito y un cuidado extremo en todo aquello que se estrena y promociona. El legendario marketing de Apple al servicio de la televisión. El resultado ha sido sobresaliente.
Apple no sólo ha logrado cumplir su objetivo de proporcionar un servicio de entretenimiento más que solvente a sus usuarios y fans por un precio reducido (ahora ya no tan reducido al subirlo a 7€/mes), sino que se ha conseguido posicionar con una identidad propia de cara al espectador. Por supuesto, ganar el Oscar a Mejor película (primera vez que una plataforma gana el Oscar) o formar parte del fenómeno Ted Lasso ligado al auge de la Premiere League ha ayudado a ello. Pero el mérito final es haber estrenado un grupo de series sobresalientes en este 2022 (“Separación”, “Pachinko”, “Slow Horses”, “Encerrado con el diablo”…). Este recién ganado status hace que cada vez haya más actores y directores dispuestos a trabajar con Apple, y que se le considere como una apuesta de prestigio por encima de otras plataformas. Sin duda la temporada de premios vendrá a confirmar este salto cualitativo.
Filmin en su Nicho
FILMIN sigue siendo ese rincón subvencionado por la UE donde ver esa serie sueca, alemana o belga que a algunos puede interesar y con un catálogo de cine clásico e independiente impresionante. En los últimos años ha perdido gran parte de los estrenos de ficción británica de primer nivel que en otros tiempos desplegaba en su catálogo, fruto de su acuerdo con All3Media (aunque mantienen el estreno en exclusiva de series tan queridas como “Todas las criaturas grandes y pequeñas”), pero su público y “target” sigue siendo un nicho muy reducido y selecto que tiene claro qué quiere ver y lo que le gusta, y que además es casi fan del proyecto empresarial. En su debe, que finalmente la relevancia en cuanto a series estrenadas en estos últimos años, va a menos.
Movistar+LITE Existe!
El caso de Movistar+ o Movistar+Lite es mucho más particular, al ser una parte de un monstruoso negocio de telecomunicaciones y de cada vez más cosas (Movistar parece cada vez más una teletienda de servicios), y al ser una suerte de escaparate de la industria audiovisual española con pretensiones (heredado del antiguo Canal+).
Con el final de dos de sus series más icónicas (hablamos de licencias, no de series propias) como “Better Call Saul” o “The Good Fight”, a Movistar+ le sostienen ya sólo tres patas: La ficción española propia que estrena cada año (pobre cosecha la de este 2022), la ficción británica proveniente sobre todo de BBC (ahora mismo su punto más fuerte) y las series de la norteamericana Showtime. Precisamente habrá que ver en qué condiciones quedan los acuerdos de series en emisión y sobre todo de los nuevos estrenos una vez que SKY SHOWTIME llegue para marzo de 2023, aunando los catálogos de Universal y Paramount y de sus respectivas filiales. Es inevitable un acuerdo estrecho o incluso que la nueva plataforma llegue bajo la tutela de la propia Movistar+, probablemente integrada dentro de su infraestructura, aunque admita suscripción también bajo una app propia (al estilo del modelo original Vodafone-HBO España).
¿Las “Streaming Wars” terminado han…?
En 2023, daremos también el adiós en los primeros meses del año a Lionsgate+, la anteriormente conocida como STARZ, que deja España y otros cuantos mercados a inicios del año que viene, por su falta de rentabilidad económica. No descarten más fusiones y adquisiciones dentro del mercado, porque esto da para lo que da, y todo el mundo parece haberse dado cuenta de que la barra libre de contenido a cuotas reducidas y cuentas compartidas no es de ninguna manera sostenible.
Menos catálogo, menos estrenos y precios más altos o en su defecto los mismos con anuncios, ése parece ser el futuro, pero… ¿Tragará el consumidor? ¿Se pasará la gente a la cuenta barata con anuncios de Netflix en el caso de poder mantener una única plataforma al menor coste mensual posible? ¿Volveremos todos a la TDT, ya que total, te tragas también anuncios y encima es gratis? ¿Al Torrent? ¿A los DVDs Princo? La solución el año que viene.
Una cosa más
En la cuenta de Twitter de “Over The top” https://twitter.com/OverTheTopES he ido publicando algunas reseñas en formato Craft de las mejores series para mí del 2022. Si alguno queréis leer algo un poco más extenso sobre las mismas, os dejo aquí los enlaces a los artículos escritos en mi Craft personal. Espero que os gusten.
Pachinko o la narrativa de los objetos https://www.craft.do/s/U0XYBC2lcVqLof
The White Lotus y la aceptación de la mentira https://www.craft.do/s/c8eKrsG2WJtX90
Los espías que resurgieron del frío https://www.craft.do/s/ML7rqbqJNJ1Omo
Esto (algún día) te va a doler https://www.craft.do/s/WH69t15Jef7CHy
A través de los pasillos de la mente https://www.craft.do/s/cbHnqHYMrmTwQ8
Y en otro orden de cosas…
Recordad que algunos jueves (como éste último) se publican unas notas de audio que complementan a esta newsletter y que podéis escucharlas cómodamente en la aplicación de Substack para vuestros dispositivos (donde además podéis comentarlas en el Chat de la misma) https://apps.apple.com/es/app/substack-reader/id1581650857. Pero si preferís escucharlas en un podcatcher, nada más fácil que agregarlas como podcast a través de esta URL de su Feed: https://api.substack.com/feed/podcast/1249768.rss
Y nada más. Agradeceros la acogida que está teniendo la newsletter y desearos un muy feliz 2023 y un cambio de año estupendo. Nos leemos la semana que viene.
José Luis Hurtado.
002| Mis plataformas del 2022
José Luis. En casa Finalmente la única plataforma que no cae es Filmin, 60 eur/año. Es una inversión y la veo cuando me apetece. No me preocupa. Con Apple TV, es casi igual pero a veces la suspendo meses. Netflix es la que siempre se cae. Cuando toque, en un mes nos ponemos al día y cancelamos. Amazon Prime, es cosa de mi mujer y no está tan mal... Y HBO interesante tenerla varios meses. The white Lotus es impagable.
Para mi es la newsletter del año. Me encanta lo que escribes y como lo escribes. Parafraseándote, no puede pasar mejor el tiempo que leyendo esta newsletter.Estupendo! “Ahí, bien entreteniditos mientas el mundo arde en llamas“.
Me encanta la combinación entre poder escucharte, formato pódcast, y poder leerte, formato blog.